Datos personales

domingo, 24 de marzo de 2013

La calle Vinatea

Recuerdo la sensibilidad de mis quince años cuando al callejear con mis amigos por los vericuetos del barrio del Carmen, camino de los billares, exclamar en voz alta: "tío, tu madre trabaja en la calle Vinatea". La calle Vinatea era un callejón sucio y ruinoso, donde las prostitutas ancianas esperaban a los clientes menos exigentes. Entre escombros y olor a orina, solo algunos viejos sin escrúpulos, invertían sus últimas monedas en una felación rápida dentro de algún portal oscuro. 
He vuelto a ver esas sillas en la calle Vinatea. Esta vez vacías. Imagino que pertenecientes al relevo generacional. Lo que queda de la calle... un muro con un graffity que dice Lucie et le sex. 



No hay comentarios: